Por: Yina Mateus
Tiempo de lectura: 3 minutos
DOS FACTORES QUE TE DIFICULTAN ALCANZAR TUS METAS
Hoy quiero traerte dos elementos que pueden estar obstaculizando que alcances los objetivos que deseas. Estos factores son: ansiedad por tener foco excesivo en el futuro y la perfección. Por medio de este artículo quiero invitarte a ser consciente si te identificas con alguno de ellos y el cómo puedes encontrar antídotos para evolucionar en cada caso.
1. Ansiedad
La ansiedad llega a ti cuando estás excesivamente preocupado por alcanzar resultados de la manera más rápida posible o estás viviendo más en el futuro que en el presente. Estás pensando en que debes alcanzar todo ya y que debes tener una gran cantidad de tareas culminadas y de rendimiento a diario. La atención en el futuro provoca incertidumbre y ansiedad. Esto no permite que te disfrutes el proceso e impide que tengas mejor tolerancia a la frustración y resiliencia. La ansiedad producirá estrés y se nublará tu capacidad para tomar decisiones de manera asertiva. Finalmente, se verá afectada tu salud, descanso y productividad.
El antídoto para la ansiedad tiene que ver con ir un paso a la vez. Aprende a ser consciente que cada actividad que realizas día a día te va a llevar a cumplir tus metas y la forma para que esto efectivamente pueda materializarse, es que las acciones que establezcas vayan alineadas a objetivos de manera coherente. Revisa de forma atenta tus acciones porque puedes estar en un quehacer que no te lleva a cumplir objetivos. Lo que te puede estar sucediendo es que te sientes ocupado haciendo muchas actividades y te creas una falsa ilusión de ser productivo, pero realmente no estás avanzando hacia lo que deseas y esto producirá mayor ansiedad.
2. Perfección
El segundo factor es la perfección. Busca progresar o evolucionar, no estés buscando la perfección. La necesidad de tener todo perfecto hará que no te lances, pospongas o evites caminar hacia un proyecto anhelado. Empezarás a prepararte para ir por tu objetivo y puede que nunca te sientas realmente listo para hacerlo perfecto. El miedo habla bien de ti, habla de tu humildad de ser un aprendiz constante y esa cantidad adecuada de miedo hará que te enfoques en dar lo mejor de ti. Este tipo de miedo se puede convertir en un estrés positivo, y no negativo que te paralice.
Empieza aún con miedo, siendo consciente que no debe ser perfecto y que se puede mejorar a partir de una primera experiencia. Realmente como seres humanos lo que menos debemos buscar alcanzar es la perfección, sino la constante evolución que nos permitirá ver qué hemos hecho bien y mal, cómo podemos mejorarlo y seguir desarrollando estrategias y planes de acción para lograr nuestras metas.
En conclusión, céntrate en vivir el ahora y establece un plan coherente y donde te enfoques en alinear tus acciones a objetivos que te generen satisfacción. Este plan debe ser alcanzable y con un margen de maniobra para rectificar, ser flexible y aprender por el camino.
Twittea o comparte este blog con quien creas que pueda necesitarlo. Déjame tus comentarios o preguntas, será un gusto contestarte.