Por: Yina Mateus
Tiempo de lectura: 5 minutos
Nuestras acciones reflejan lo que sucede en nuestro interior
Nuestras acciones muestran realmente quiénes somos y la manera en la cual las personas se hacen una idea de nosotros. Las acciones tienen el poder de revelar todo lo que hay en nuestro interior porque se tratan de nuestra respuesta al mundo por medio de la conducta. La manera en la cual actuamos refleja nuestro pasado, presente y futuro. Esto significa que nuestra conducta se genera a partir de lo que hemos aprendido y acumulado a lo largo de nuestra vida y tiene que ver con nuestras creencias, preocupaciones, temores, paradigmas, valores, principios, experiencias del pasado, otros.
Cuando tomas una acción le dices sí o no a algunas personas o situaciones. Aún cuando no actúas estás actuando, aunque no parezca. Así que ser muy consciente de tus acciones te llevará a acercarte a tus metas. Para lograr tus objetivos debes conectarte con tu fuerza de acción interminable. Si quieres encontrar esa gasolina inagotable, debes realizar una conexión profunda y diaria con tu propósito, con aquello que le da sentido de realización a tu vida. Esto significa que lo que realmente nos mueve no es un mecanismo externo. Lo que realmente hace que nos movamos hacia la acción viene de adentro hacia afuera.
Desde hoy aprende o profundiza en detenerme para avanzar, de nuevo, detenerme para avanzar. Si quieres moverte hacia la acción y no seguir postergando lo que quieres para ti es importante que aprendas a conocer cómo actúas. Te invito a parar hoy a observar tu pasado:
¿Qué detonan usualmente mis acciones?
¿Qué ha hecho que me mueva con una fuerza inagotable en el pasado?
¿Qué tenían en común cada uno de esos movimientos que hice?
¿Qué me detuvo para actuar en determinado momento?
Cuando actué, ¿esas acciones estuvieron alineadas a mis objetivos?
Recuerda que detrás de cada acción existe la intención de traer algún beneficio para tu vida. Aunque sientas que no avanzas, que tú mismo te limitas o vas más lento de lo que quisieras, siempre estarás buscando de forma oculta un beneficio para ti. Vamos a escarbar qué hay detrás de nuestras excusas, limitaciones autoimpuestas o de los momentos en los que hemos procrastinado. Ejemplo:
Aquellos momentos en los que me digo a mí mismo que quiero tener más tiempo y gozar de balance para compartir con mi familia y amigos y sigo trabajando de manera agotadora, debo cuestionarme en lugar de quejarme o seguir igual: ¿Qué hace que elija trabajar todas las horas y días que lo hago? ¿A qué es aquello a lo que realmente le estoy dando valor y siento que se convertiría en una amenaza o problema si cambio el cómo actúo?
Plantéate este tipo de preguntas para situaciones en tu vida en donde te sientes en una encrucijada o incómodo. Si hay incomodidad, hay algo importante por explorar. Aprende a escuchar qué quieren decir de ti tus propias acciones.
Todas las acciones y los resultados que has obtenido han activado información para el futuro. Liderar tu vida significa diseñar tu futuro y aunque en el pasado tal vez no hayas tenido resultados que te hayan gustado, es hora de observar al pasado y presente con cara de aprendizaje y no de error. Para ello, tomarás desde hoy la decisión de escuchar tus propias acciones.
Si quieres empezar a desvelar tu fuerza de acción interminable descarga la siguiente cartilla gratuita:
Pregúntame lo que quieras en mis redes sociales y te ayudaré a recorrer tu camino de evolución.
Twittea o comparte este blog con quien creas que pueda necesitarlo. Déjame tus comentarios o preguntas, será un gusto contestarte.